Los osos polares desaparecerán a finales del siglo a menos que se haga más para abordar el cambio climático, según los estudios.

Los científicos dicen que algunas poblaciones ya han alcanzado sus límites de supervivencia a medida que el hielo marino del Ártico se reduce.

Los carnívoros dependen del hielo marino del Océano Ártico para cazar focas.
A medida que el hielo se rompe, los animales se ven obligados a vagar largas distancias o en la orilla, donde luchan por encontrar comida y alimentar a sus cachorros.

El oso se ha convertido en el «ejemplo del cambio climático»; si el hielo desaparece, no tendrá adónde ir.

Los osos polares están clasificados como vulnerables a la extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), con el cambio climático como clave factor de su declive.